Qué contenta estaba de que el negro la invitara al palo, ¡estaba saltando de felicidad! Y ojo, que fue ella la que se lo pidió, y él como si nada. Claro, todo el mundo en la uni ya sabe la gran polla que tiene, así que las tías corren a alegrar sus agujeros. Esta morena incluso le dio su culo y no le importó que entrara. Y entonces algún empollón tomará a una puta así como esposa. Y estará seguro de que es virgen. ))
El blanco quería chocolate caliente para la noche. Y que le dieran un lametón a sus pollas. La tía buena llegó rápidamente a la habitación y se frotó el coño. El cliente, al encontrarla en la habitación - disfrutó de la comida, tiró de la cadena y se fue a la ducha. Y la perra se quedó esperando al siguiente dulce amante. ¿A cuántos sirve en una noche?
Es una puta estúpida